
Rentas cortas en zonas turísticas: ¿Vale la pena invertir en la isla de Barú?
Invertir en rentas cortas en zonas turísticas ha ganado popularidad en los últimos años, especialmente en destinos con gran atractivo como la isla de Barú, en la costa caribeña de Colombia. Ubicada cerca de Cartagena, Barú no solo se distingue por sus playas de arena blanca y aguas cristalinas, sino también por su creciente desarrollo turístico y su potencial de rentabilidad para los inversionistas inmobiliarios.
¿Por qué invertir en rentas cortas en la isla de Barú?
La isla de Barú ha visto un notable crecimiento en los últimos años, con un flujo constante de turistas nacionales e internacionales que buscan disfrutar del mar Caribe y la tranquilidad de sus playas. En el primer semestre de 2024, Cartagena registró más de 1.700.000 visitas, con una tasa de ocupación hotelera del 64%. Este dinamismo convierte a Barú en un destino con una alta demanda de alojamientos temporales, lo que se traduce en una excelente oportunidad para los inversores que desean capitalizar el auge del turismo.
A medida que la isla continúa desarrollándose, con nuevas infraestructuras y proyectos de lujo en camino, la demanda de propiedades para alquileres cortos también incrementa. Este tipo de inversión no solo proporciona ingresos a través de la renta, sino que también permite al propietario disfrutar de la propiedad para uso personal en épocas de menor afluencia, combinando rentabilidad con un estilo de vida exclusivo.
Ventajas de las rentas cortas frente a los alquileres a largo plazo.
Mayor rentabilidad: Las rentas cortas en zonas turísticas como Barú suelen generar mayores ingresos que los alquileres tradicionales. Mientras que un contrato de renta a largo plazo establece un precio fijo mensual, los alquileres de corta duración permiten ajustar las tarifas según la temporada, eventos especiales y la demanda turística, maximizando así el rendimiento.
Flexibilidad para el propietario: A diferencia de los alquileres a largo plazo, donde el propietario tiene un compromiso fijo, las rentas cortas permiten al inversor usar la propiedad para disfrute personal en cualquier momento. Esto es especialmente atractivo para aquellos empresarios que buscan diversificar su portafolio mientras disfrutan de una segunda residencia en la playa.
Menor desgaste y mantenimiento: Las propiedades destinadas a rentas cortas suelen estar mejor mantenidas gracias a la limpieza y revisión constante entre huéspedes. Además, se puede monitorear más fácilmente el estado de la propiedad y hacer reparaciones preventivas, evitando así el deterioro que a veces ocurre con inquilinos a largo plazo.
Aprovechamiento de incentivos fiscales: En muchas zonas turísticas, incluyendo la costa colombiana, existen incentivos fiscales para inversiones en el sector hotelero y de alojamiento turístico. Esto puede representar un ahorro adicional y mejorar aún más la rentabilidad neta de la inversión.
Barú: Un destino en pleno crecimiento
La isla de Barú se encuentra en un momento ideal para los inversionistas. El creciente número de turistas y la mejora de la infraestructura turística están impulsando la valorización de las propiedades en la zona. Además, con la cercanía a Cartagena, que es un centro histórico y cultural de primer nivel, Barú ofrece un equilibrio perfecto entre la serenidad de una isla caribeña y el acceso a la vida urbana.
Los proyectos de lujo y desarrollos exclusivos en curso están captando la atención de los inversores que buscan no solo una propiedad rentable, sino también un estilo de vida. Comprar una vivienda en Barú no es solo una inversión financiera, sino también en calidad de vida, ya que ofrece un refugio para disfrutar del sol, la playa y el mar en un ambiente exclusivo.
Hábitat Costamar: Un proyecto exclusivo en la isla de Barú
Dentro del creciente panorama de inversión en Barú, el proyecto Hábitat Costamar se presenta como una oportunidad exclusiva para aquellos que buscan rentabilidad, lujo y confort en un mismo lugar. Este proyecto inmobiliario está diseñado para satisfacer las expectativas de inversores exigentes que buscan propiedades de alto nivel en destinos turísticos de primer orden.
¿Qué hace especial a Hábitat Costamar?
Hábitat Costamar se encuentra ubicado en un entorno privilegiado, con acceso directo a la playa y rodeado por la exuberante belleza natural de la isla de Barú. El proyecto ofrece una combinación de elegancia y confort, con unidades residenciales que cuentan con diseños modernos, acabados de lujo y servicios de primer nivel para asegurar una experiencia de vida única. Además, los propietarios pueden disfrutar de amenidades exclusivas como piscina tipo play y piscina con borde infinito, gimnasios, spa, zona de hamacas, jacuzzis, muelle naútico, coworking, juegos acuáticos para niños y zonas de esparcimiento que complementan el estilo de vida beach living que ofrece el Caribe.
Hábitat Costamar representa una inversión estratégica en un mercado con un alto potencial de crecimiento y en un proyecto con características pensadas para atraer a los turistas más exigentes. Las unidades están diseñadas para maximizar el retorno a través de rentas cortas, aprovechando la alta demanda turística de Barú y su proximidad a Cartagena, un destino muy popular en Colombia.
Rentabilidad y estilo de vida en un solo lugar
Invertir en una unidad en Hábitat Costamar ofrece claras ventajas sobre los alquileres a largo plazo. La posibilidad de ajustar las tarifas según la temporada turística y las facilidades para mantener la propiedad en perfecto estado hacen que las rentas cortas sean una opción más rentable y flexible. Además, el valor de reventa de una propiedad en un proyecto de lujo como Hábitat Costamar tiende a apreciarse más rápidamente, ya que está respaldado por la demanda continua de turismo y el desarrollo de infraestructura en la isla de Barú.
Hábitat Costamar en la isla de Barú no solo se presenta una inversión inmobiliaria rentable, sino también como una puerta a un estilo de vida exclusivo y privilegiado. Es el lugar donde la rentabilidad financiera y el disfrute personal se encuentran, ofreciendo a los inversionistas una oportunidad excepcional para diversificar su portafolio mientras disfrutan de uno de los destinos más hermosos del Caribe colombiano.